El amor de un idiota

 




Tanizaki nos presenta en esta novela una suerte de Pigmalion en la que el profesor (Henry Higgins) deja paso a un simple (literalmente) oficinista que pretende hacer de Naomi una perfecta encarnación de la belleza total. El pobre Joji, que así se llama el incauto, descubrirá que las armas de una mujer son muchas y muy poderosas, no sin sufrir en sus propias carnes la desafección y el desencanto.
Como todo lo que hace el autor lleno de crítica y sarcasmo, un Japón cada vez más occidentalizado, rendido totalmente a los encantos venidos más allá del mar, está representado en este oficinista tontorrón que se ve seducido, sin saberlo, por las artes de una camarera ambiciosa que ve el cielo abierto con la proposición de este caballerete. Muy divertida, ingeniosa y entretenida. Tanizaki en estado puro.

El amor de un idiota (Junichiro Tanizaki Satori 2018)

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